Castro de San Isidro (próximo a Bousoño – San Martín de Oscos). Cuenta con un sistema defensivo, de piedras hincadas, que imposibilitaba la entrada de la caballería enemiga, único en Asturias.

Sierra de la Bobia (se puede observar desde la carretera que va del puerto de La Garganta a Illano), con el bosque de La Bobia, el carbayal más extenso de Oscos y la Sela de Murias (La Selva), un inmenso bosque de castaños.

Alto La Garganta: hace de frontera entre Oscos y los concejos de la costa. Desde su mirador, se disfruta de hermosas vistas del mar y la montaña.

Plaza de San Martín de Oscos, con la iglesia, el hórreo de Curón, de cubierta vegetal y la portada barroca del Palacio de los Guzmán.

La etnografía de nuestros pueblos: casas de piedra, madera y pizarra, como el Conjunto de As Casías, hórreos (algunos con cubierta vegetal como en Morlongo ó Pasarón), mazos, molinos, cortines para la miel, etc.

Iglesias parroquiales de San Martín (S. XIX) y Santa Eulalia (S. XVII).

Capillas y ermitas diseminadas por toda la Comarca: Quintá (600 años de antigüedad), Busqueimado, con sendos tejos y más de 600 años, Vilarín de Tresmonte, Labiarón, Martul con tejo acompañando y más de 400 años de antigüedad, Santa Eufemia, son buenos ejemplos.

Palacios, casas, torres, con cientos de años de antigüedad, nos enseñan el poder de otros tiempos. Ejemplos son los de Mon, Cabeza da Vila (San Martín), Casona de Los Pruida (Santa Eulalia), Casa de Aquél Cabo (Barcia), la Torre de los Lombardía (A Valía), Casona de los Fernández Lombardero (Ferreirela de Riba), Casa Guzmán (Martul), etc.

Minas: hubo minería romana en Arruñada y minas de hierro, plomo, cinc, etc. como La Excomulgada, Pena Teixeira, Carmina, Villa Pascón, As Cárquivas, Busdemouros, etc. Actualmente algunas, pueden ser visitadas.